La capital regresa como anfitrión después de haber organizado el Mundial previamente en 2015
La decisión fue tomada por el Consejo de World Athletics durante su asamblea anual en Glasgow, donde también se llevará a cabo el Mundial indoor del 1 al 3 de marzo. Además, el Consejo aprobó que los mundiales se celebren anualmente a partir de 2025, sin confirmar si habrá sede en 2026 ni la fecha exacta de la edición de septiembre.
Esta elección representa una oportunidad estratégica para el atletismo, ya que China, con una población de 1.400 millones de habitantes, es uno de los mercados deportivos más grandes del mundo. Sebastian Coe, presidente de World Athletics, destacó: “Fue el país que aglutinó más audiencia televisiva en la Diamond League en 2023 con 368,9 millones de espectadores y es una gran oportunidad para hacer crecer nuestro deporte”.
La decisión de otorgar el Mundial a Pekín también refleja una deuda pendiente de World Athletics con el país asiático, que se vio afectado por la suspensión de varias competiciones debido a la pandemia. Coe había mencionado previamente el interés en explorar mercados importantes como India para futuras sedes.
Pekín, que en 2022 se convirtió en la primera ciudad en organizar tanto los Juegos Olímpicos de verano como los de invierno, se destaca como una opción sólida. Mientras tanto, el sueño de Barcelona de albergar un Mundial de Atletismo tendrá que esperar, al menos, hasta 2029.
La ambición de World Athletics es seguir expandiéndose hacia mercados con gran potencial, y si India cumple con los requisitos, podría ser considerada como una futura sede.