Consejos prácticos para optimizar tu preparación en las horas previas a la competición, según la distancia a recorrer
Con la llegada de una competición importante, muchos corredores se preguntan sobre la mejor manera de preparar su cuerpo en las horas previas a la carrera. ¿Es recomendable descansar por completo, elevar las piernas o realizar una breve sesión de trote?
Para carreras de 10 kilómetros o menos, se sugiere evitar la inactividad total. Una activación ligera, como un trote suave de aproximadamente 20 minutos, puede resultar altamente beneficiosa. Este tipo de ejercicio ayuda a activar la circulación y preparar los músculos para la competición, lo que permite a los corredores salir con mayor energía.
En el caso de las medias maratones o maratones, la estrategia es diferente. Aquí, es crucial preservar la energía. Un trote muy suave de entre 10 y 15 minutos, complementado con estiramientos dinámicos, es más que suficiente para mantener los músculos activos sin agotar las reservas de energía.
Aunque las últimas 24 horas antes de una carrera no son determinantes para mejorar el rendimiento, pueden proporcionar ese impulso adicional que muchos atletas necesitan para enfrentar el evento con confianza y energía.