La corrupción y la pobreza son factores que impulsan el aumento del dopaje entre los deportistas
La situación del dopaje en Kenia se ha vuelto alarmante, con más de 110 atletas sancionados hasta la fecha y una tendencia que continúa en aumento. Raphael Roux, enviado de la Unidad de Integridad del Atletismo (AIU) de World Athletics a Kenia, atribuye esta problemática a la pobreza y la corrupción.
El tráfico de sustancias ilegales involucra a médicos, enfermeras y otros actores en un país donde las recompensas económicas del deporte pueden cambiar vidas.
«Pagamos bien a los inspectores con la esperanza de que así estén menos dispuestos a aceptar sobornos, pero también hay falsos inspectores que llaman a los deportistas y les piden 10.000 euros para que mantengan su silencio, o gente que envía una carta en nombre de la ADAK para informar de un positivo y piden dinero para mantener su silencio», señala Roux.
La presión económica es considerable; un atleta que gana 10.000 dólares en un maratón puede sostener a su familia durante 10 años, lo que lleva a muchos a arriesgarse. “El hecho de que se gaste tanto dinero en correr también significa que mucha gente espera beneficiarse de ello”, concluye Roux.
