España firma su mejor actuación en unos Mundiales desde 2010 con tres medallas de bronce

Elvin Josué Canales, Fátima Diame y Ana Peleteiro suben al podio en una edición histórica para el atletismo español

El atletismo español ha vivido un momento para el recuerdo tras cerrar los Campeonatos del Mundo en pista cubierta con tres medallas de bronce, firmando su mejor resultado desde Doha 2010. Los protagonistas de esta hazaña han sido Elvin Josué Canales en los 800 metros, Fátima Diame en salto de longitud y Ana Peleteiro en triple salto.

La primera alegría llegó con Fátima Diame, de 28 años, que repite la tercera posición lograda el año pasado en Glasgow. La siete veces campeona de España de pista cubierta abrió el concurso con un salto de 6,72 metros, marca que le bastó para asegurar el bronce. A partir de ahí, su rendimiento fue decreciendo con dos intentos nulos y tres saltos por debajo de los 6,50 m.

Poco después, fue el turno de Elvin Josué Canales, que sorprendió al lograr la medalla de bronce en una final muy táctica de los 800 metros. El mediofondista cruzó la meta con un tiempo de 1:45.03, consolidando su posición entre los grandes del panorama internacional.

La tercera medalla llegó gracias a una habitual del podio internacional: Ana Peleteiro, que volvió a brillar en el triple salto con otro bronce, apenas dos semanas después de proclamarse campeona de Europa en pista cubierta. Una muestra más de su regularidad y talento en las grandes citas.

Con este resultado, España suma tres medallas y consigue su mejor actuación en unos Mundiales en pista cubierta desde 2010, demostrando que el atletismo nacional vive un momento dulce y que hay una nueva generación preparada para seguir sumando éxitos.

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